Un enigma aún por descubrir: Puerta Califal de Ceuta

Dos meses han transcurrido desde que la empresa Jomasa inició los trabajos de consolidación y puesta en valor de la Puerta Califal, una intervención en la que la labor de investigación, documentación y la arqueología tienen aún mucho que decir.

Javier Arnáiz, arquitecto municipal que está dirigiendo las obras, subraya el interés histórico de este elemento patrimonial que fue localizado hace una década en el interior de un almacén dentro de las bóvedas del Parador Nacional Muralla.
La intervención tiene como objetivo poner el valor la trascendencia histórica del yacimiento, considerado una joya para España al albergar, en un espacio sumamente reducido, (el entorno de la Puerta es de unos 60 metros cuadrados) restos de entre los siglos I y XVI, algo que es difícil encontrar en otro lugar del país. Mario Valverde, de Jomasa, empresa que se encarga de la obra, subraya la importancia de una puerta ornamental “que en el siglo X, plena época califal, era el principal acceso a la ciudad”, explica. “Se sintetizan en un espacio reducido 2.000 años de historia de Ceuta, desde el siglo I a nuestros días”, concluye también Arnáiz.
Por este motivo, la intervención ha comenzado por la cubierta, donde la arqueóloga Cibeles Fernández está trabajando para descubrir algunos de los enigmas que aún encierran estos muros, “sobre todo datarlos y conocer cuántas estructuras distintas hay”. En función de estos hallazgos se colocará la escalinata que el arquitecto José Pedro Pedrajas diseñó para acceder desde la cubierta hasta el interior de la Puerta.
Esta labor de investigación es paralela a la que más abajo, en el interior de la bóveda, se realiza por parte de los técnicos de la empresa Chapitel Conservación y Restauración S.L. para la limpieza y consolidación de los revestimientos de los estucos y la Puerta, cuyo arco se encuentra en la actualidad protegido por láminas de poliestireno expandido (poliespan), un material plástico espumado y utilizado en el sector del envase y la construcción.
Tanto Arnáiz como Valverde subrayan que el interés, en esta primera fase de la obra, es conocer hasta dónde se pueda que ocultan los muros de los baluartes de la Bandera y la Coraza, donde hasta ahora nunca se había intervenido en profundidad. “Siempre se ha trabajado en la otra zona de las Murallas Reales”, apuntan. Lo que sí se sabe desde hace años con certeza absoluta es que a la Puerta del siglo X le precedieron otras estructuras.
Los arqueólogos e investigadores han considerado este es un enclave único para la investigación histórica al concentrar los dos grandes estilos constructivos de las fortificaciones antiguas como la medieval y la renacentista. Igualmente se resalta el hecho de que el estado de conservación del recinto amurallado donde se ubica la puerta sea excepcional, por haber sido reutilizado por los portugueses, que lo dejaron emparedado en el interior de la muralla levantada en el siglo XVI.
El conjunto está formado por tres puertas, tres bóvedas, dos torres y lienzos, además de restos romanos en el subsuelo, que se cree podrían pertenecer a la fábrica de salazones que tuvo la ciudad de los siglos I y II. La excavación alcanza una profundidad de hasta ocho metros, un fondo en el que se han hallado todo tipo de materiales y estructuras.
Según está previsto en el proyecto de Pedrajas, una vez concluidos los trabajos el visitante accederá a este espacio desde el antiguo night club Candelero, frente al actual Baluarte de los Mallorquines. Se trata de una zona anexa al Parador Municipal que lleva al menos dos décadas sin utilizarse. Será un acceso independiente al hotel, aunque se podrá acceder también desde el interior del Parador, cuya colaboración y ayuda ha sido imprescindible para la puesta en marcha de esta actuación. Desde allí el visitante accederá a la cubierta de una parte de las Murallas Reales que hasta ahora ha sido intransitable. La cubierta se preparará para que se pueda también disfrutar de las vistas, y a través de una pasarela se adentrará en el yacimiento para pasar incluso por debajo de la famosa Puerta Califal.
Y es que precisamente de la cubierta descenderá la escalera por la que el visitante podrá acceder a la Puerta Califal, objetivo también de esta actuación que busca también concienciar al ciudadano de la importancia de su patrimonio. En unos dos años los ceutíes disfrutarán de este nuevo entorno.
Precisamente para mañana lunes el presidente de la Ciudad ha programado una visita a la Puerta Califal, donde acudirá acompañado de los técnicos que supervisan el proyecto y de las consejeras de Educación, Cultura y Fomento.

Barriendo con el radar

La investigación en el entorno de la Puerta Califal ha contado con la contribución de los técnicos de la empresa Cóndor Georadar, especializada en detecciones electrónicas por medio de sofisticados aparatos. A mediados del pasado mes de julio, personal de Cóndor se encargó de realizar barridos en horizontal sobre la cubierta y en vertical sobre el lienzo portugués que da al Foso para localizar posibles estructuras que se encontraran ocultas tras la muralla.
Las antenas utilizadas han proporcionado información sobre los materiales con una profundidad de hasta 8 metros, lo que ha desvelado algunas dudas sobre el trazado de la muralla califal. Su informe ha confirmado la existencia de estructuras desconocidas, que podrían corresponder incluso con dos torres, y alguna estructura de mayor tamaño.
Esta empresa ha trabajado desde hace más de diez años en la localización de estructuras enterradas mediante la realización de inspecciones no intrusivas y no destructivas con la utilización de radar de penetración terrestre. Condor Georadar ha realizado prospecciones para organismos oficiales españoles como el Ministerio de Defensa o el de Medio Ambiente y también ha contribuido a la localización de más de cien fosas comunes desde que se puso en marcha la Ley de Memoria Histórica. Ahora ha sido el Gobierno libio el que se ha interesado por su trabajo.
Además de localizar fosas comunes, Cóndor Georadar colabora habitualmente con los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado para encontrar a personas desaparecidas. Entre los últimos casos en los que han colaborado se encuentra la búsqueda en la finca de las Quemadillas, en Córdoba, de los niños Ruth y José. Técnicos de esta empresa realizaron barridos con geo radar de la finca y de la vivienda en varias ocasiones.
También han demandado sus servicios para asuntos tan dispares como la localización de restos arqueológicos, como es el caso de Ceuta, o el hallazgo de contaminación por hidrocarburos por encargo de las petroleras.

Estrecho seguimiento en facebook y twitter


La de la Puerta Califal es una obra que puede seguirse puntualmente desde las redes sociales. Tanto en facebook (Puerta Califal de Ceuta) como en twitter (@puertacalifal) se han abierto cuentas desde las cuales los internautas pueden comprobar la evolución de los trabajos, comentarios de expertos, descargarse documentación y visionar fotografías y videos. “Se trata de la primera vez en Ceuta en la que este seguimiento es tan exhaustivo”, explica Mario Valverde. Las redes sociales se han convertido en un canal más de comunicación y de acercamiento al ciudadano que ha sido aprovechado por primera vez en Ceuta con fines divulgativos.