La Junta refuerza la protección del Conjunto Histórico de Alhama de Granada

Alhama vivió su época de mayor trascendencia histórica durante la Baja Edad Media, como plaza fuerte del reino nazarí de Granada. Tras la conquista cristiana conservó su importancia, como lo prueban sus monumentos más significativos.

El Consejo de Gobierno ha aprobado una delimitación de 144,63 hectáreas para el Conjunto Histórico de Alhama de Granada. La Junta refuerza así la protección patrimonial y paisajística de esta población al concretar y ampliar los límites imprecisos de su anterior declaración estatal de 1975. La nueva área, a la que se añade un entorno de protección de 181,85 hectáreas, incorpora como nuevos espacios los Tajos sobre los que se asienta la ciudad, los Baños Árabes, el Barrio de la Joya y la totalidad del Barrio Alto.

Los Tajos, accidente geográfico inseparable de la propia imagen de Alhama de Granada, presentan destacados valores naturales, históricos y etnológicos, además de numerosos yacimientos arqueológicos, ermitas, acequias y molinos. Su conexión con la ciudad también se subraya con la pervivencia de elementos islámicos como los silos, la mazmorra o las denominadas 'Escalerillas del Diablo'.

La inclusión de los Baños Árabes en el conjunto se debe a su histórica vinculación con la población y a su condición de referente cultural significativo de la misma. Este balneario se documenta en las representaciones más antiguas de la ciudad, como la conocida 'Civitates Orbis Terrarum' de Jorge Hoefnagel (1535).

El tercero de los nuevos sectores es el Barrio de la Joya, planificado para cubrir las necesidades tras la destrucción provocada por un terremoto en 1884.

Esta zona urbana, bien conservada y fundamental para entender el desarrollo de la ciudad en el siglo XX, destaca por la regularidad de su trazado.

Por último, el Barrio Alto, ya en parte protegido por la delimitación de 1975, corresponde a las calles situadas en torno al Convento de San Diego (siglo XVII), que mantienen una continuidad espacial y constructiva con las de mayor antigüedad situadas más abajo.

Alhama vivió su época de mayor trascendencia histórica durante la Baja Edad Media, como plaza fuerte del reino nazarí de Granada. Tras la conquista cristiana conservó su importancia, como lo prueban sus monumentos más significativos: la Iglesia Mayor de la Encarnación (siglos XV-XVI), la Iglesia del Carmen (siglo XVI), la Casa de la Inquisición (siglo XV), el Hospital de la Reina (siglo XV), los restos del castillo de origen árabe, la Cárcel Real (siglo XII) o la fuente renacentista conocida como Caño Wamba.