Call for papers Revista Arkeogazte nº 3. Monográfico sobre Bioarqueología
1/12/12 .- www.arkeogazte.org
Tras el lanzamiento del número 2 de Arkeogazte Revista hace un mes, ya tenemos el Editorial del número 3 para el año que viene. El tema monográfico elegido es "Arqueología y medio ambiente: Una historia de una ida y de una vuelta" y en el texto podréis encontrar el enfoque que buscamos.
También se puede participar en las secciones de Varia, artículos de temática libre, o Recensiones, para la que se ha hecho un listado de propuestas.
El plazo de entrega de originales acabará el 30 de abril de 2013, pero, si queréis participar, os agradeceríamos que nos hicierais llegar un Abstract de unas 250 palabras antes del viernes 18 de enero. Como siempre, las normas de publicación podéis consultarlas en la web de la revista (www.arkeogazte.org).
Comite Editorial de Revista Arkeogazte/Aldizkaria
El objetivo de la Arqueología es el estudio del ser humano en el pasado a través del registro material. Ahora bien, las sociedades humanas no pueden ser entendidas sin considerar el medio que las rodea, que utilizan y transforman y del que forman parte. Hace ya más de cinco décadas que la Arqueología comprendió la importancia del medio ambiente para una aproximación global a las sociedades humanas del pasado y empezó a abordarlo a través de diferentes disciplinas científicas relacionadas con las ciencias naturales. Así, la Botánica, la Antropología, la Zoología, la Geografía, la Geología, la Física o la Química han sido utilizadas por arqueólogos para el estudio del ser humano con resultados positivos no sólo para nuestra disciplina, sino también para las ciencias de las que ésta se ha servido. La colaboración entre profesionales necesaria para desarrollar este tipo de estudios puede nacer tanto de especialistas procedentes de las ciencias naturales con interés en la Arqueología, como de arqueólogos formados en estas disciplinas, de modo que ambos colectivos puedan crear conjuntamente preguntas históricas y conceptos comunes para trabajar interdisciplinarmente. En cualquier caso, entendemos que para rentabilizar en términos históricos estos análisis es imprescindible introducir la variable humana
en los ejes del proyecto. Como arqueólogos y arqueólogas pensamos que son las sociedades humanas quiénes han de vertebrar el discurso histórico, que sin ellas no hay Arqueología.
Por lo tanto, podemos afirmar que, valiéndose de la inercia inicial ejercida por la Arqueología prehistórica, en la actualidad las ciencias paleoambientales han pasado a formar parte fundamental de los estudios arqueológicos en su conjunto. La mayoría de los proyectos arqueológicos actuales las considera imprescindibles para el conocimiento de las sociedades del pasado. No obstante, el desarrollo de la Arqueología ha llevado en numerosos casos a una “ultraespecialización” de la investigación, haciendo que estudios como los paleoambientales se conviertan en un fin en sí mismos y se olviden las sociedades humanas que hay detrás. En este sentido, queremos apartarnos de la figura del arqueólogo paleoambiental aislado en su laboratorio, que no participe activamente en la construcción del registro arqueológico y que no intervenga en la interpretación histórica global del yacimiento. Insistimos en la idea de la integración de los datos paleoambientales dentro de un discurso arqueológico amplio, entendiendo que las sociedades son totalidades que no pueden parcelarse en diversos campos y que no pueden estudiarse aisladamente. Y es que esta tendencia ha conllevado que los estudios paleoambientales se alejen de su verdadero fin arqueológico: la reconstrucción de las sociedades históricas en el contexto natural en el que vivían.
De este modo, el objetivo de este nuevo monográfico de Revista Arkeogazte es actuar como canalizador de las relaciones entre Arqueología y ciencias paleoambientales. Es por ello necesario enfatizar el término paisaje, como concepto teórico que aborda las relaciones entre el medio ambiente y las sociedades humanas. El paisaje, entendido como un constructo social y cultural, es un marco de trabajo excepcional que permite trasladar el objeto de análisis desde el “yacimiento” en sentido clásico, hacia una concepción más amplia e inclusiva. Asimismo, el paisaje es una construcción en el tiempo, lo que permite a la Arqueología analizarlo en sentido diacrónico como un palimpsesto de antiguos paisajes culturales que se van superponiendo unos a otros.
Además, desde esta perspectiva el estudio de la relación entre el ser humano y el medio ambiente puede contribuir a crear conciencia sobre el paisaje como un elemento fundamental dentro de nuestro patrimonio natural y cultural, abordando problemáticas actuales desde una perspectiva arqueológica y antropológica. En este sentido, es necesario resaltar el impacto que ha tenido el ser humano sobre los paisajes naturales, lo que ha llevado a entender que poco o nada queda de lo puramente natural y que el paisaje que ha llegado hasta nosotros no es más que el resultado de esta relación. No podemos olvidar que el paisaje actual es un producto activo de la interacción de todas las piezas que lo componen y un elemento a proteger tanto por sus valores históricos como ambientales, para lo cual es necesario investigar y conocer su génesis y desarrollo. En los últimos años la valorización de estos espacios ha impulsado numerosos proyectos de salvaguarda de este tipo de patrimonio, un patrimonio definido por la UNESCO (Documento WHC-92/CONF.002/12) como “paisajes culturales”, “espacios creados, formados y preservados por los vínculos y las interacciones entre el ser humano y su entorno”.
Por todo ello, desde el Comité Editorial de Revista Arkeogazte, proponemos para este tercer número explorar la relación entre Arqueologíae y medio ambiente reconsiderando su finalidad, originariamente clara pero actualmente dispersa. Siguiendo a Tolkien, queremos contar “una historia de una ida y de una vuelta”, un viaje de los orígenes al futuro de las ciencias paleoambientales aplicadas a la Arqueología, en el que las sociedades del pasado vuelvan a ser el fin y el sujeto principal de estudio; volver al origen del viaje sin olvidar el camino ya recorrido. Buscamos estudios paleoambientales en los que se considere, por un lado, el análisis de las sociedades históricas y, por otro, se enfatice el medio ambiente y el paisaje actual como elementos fundamentales de su acervo cultural.
Por lo tanto, en la sección monográfica se publicarán, por una parte, artículos en los que una disciplina paleoambiental específica y la Arqueología se unan para analizar la relación entre sociedades humanas y medio ambiente en un contexto histórico concreto. Las aproximaciones multiproxy en las que se combine más de una técnica para la lectura integral de los paisajes también serán bienvenidas. El acento de los trabajos debe estar sobre la contribución de las ciencias paleoambientales a la reconstrucción de comportamientos humanos. En ningún caso serán aceptados estudios de caso que no incorporen esta perspectiva. Sin embargo, se valorarán positivamente los artículos que ilustren el desarrollo teórico con la presentación de casos aplicados.
Por otra parte, se publicarán trabajos tanto generales como de casos particulares que combinen el análisis de los patrimonios ambiental e histórico como valores activos para la conservación de los paisajes culturales contemporáneos. Buscamos, por lo tanto, estudios que planteen la salvaguarda y la puesta en valor de los paisajes históricos como parte de la identidad de las sociedades actuales.
Como viene siendo habitual, además del monográfico, Revista Arkeogazte incluirá las secciones Varia y Recensiones. En la primera tendrá cabida cualquier artículo sobre Arqueología, sin límites cronológicos, geográficos o temáticos. Tanto estos trabajos, como los que se publiquen en la sección monográfica serán corregidos mediante el sistema de pares ciegos. Además, para este tercer número el Consejo Editorial ha decidido proponer una serie de títulos para Recensiones. Cualquier autor podrá participar en esta sección atendiendo a las sugerencias.
El plazo para la entrega de originales finaliza el 30 de abril de 2013. Las normas de publicación pueden consultarse en nuestra página web (www.arkeogazte.org) y cualquier duda o sugerencia puede gestionarse a través de la dirección de correo electrónico arkeogazterevista@gmail.com.
También se puede participar en las secciones de Varia, artículos de temática libre, o Recensiones, para la que se ha hecho un listado de propuestas.
El plazo de entrega de originales acabará el 30 de abril de 2013, pero, si queréis participar, os agradeceríamos que nos hicierais llegar un Abstract de unas 250 palabras antes del viernes 18 de enero. Como siempre, las normas de publicación podéis consultarlas en la web de la revista (www.arkeogazte.org).
Comite Editorial de Revista Arkeogazte/Aldizkaria
El objetivo de la Arqueología es el estudio del ser humano en el pasado a través del registro material. Ahora bien, las sociedades humanas no pueden ser entendidas sin considerar el medio que las rodea, que utilizan y transforman y del que forman parte. Hace ya más de cinco décadas que la Arqueología comprendió la importancia del medio ambiente para una aproximación global a las sociedades humanas del pasado y empezó a abordarlo a través de diferentes disciplinas científicas relacionadas con las ciencias naturales. Así, la Botánica, la Antropología, la Zoología, la Geografía, la Geología, la Física o la Química han sido utilizadas por arqueólogos para el estudio del ser humano con resultados positivos no sólo para nuestra disciplina, sino también para las ciencias de las que ésta se ha servido. La colaboración entre profesionales necesaria para desarrollar este tipo de estudios puede nacer tanto de especialistas procedentes de las ciencias naturales con interés en la Arqueología, como de arqueólogos formados en estas disciplinas, de modo que ambos colectivos puedan crear conjuntamente preguntas históricas y conceptos comunes para trabajar interdisciplinarmente. En cualquier caso, entendemos que para rentabilizar en términos históricos estos análisis es imprescindible introducir la variable humana
en los ejes del proyecto. Como arqueólogos y arqueólogas pensamos que son las sociedades humanas quiénes han de vertebrar el discurso histórico, que sin ellas no hay Arqueología.
Por lo tanto, podemos afirmar que, valiéndose de la inercia inicial ejercida por la Arqueología prehistórica, en la actualidad las ciencias paleoambientales han pasado a formar parte fundamental de los estudios arqueológicos en su conjunto. La mayoría de los proyectos arqueológicos actuales las considera imprescindibles para el conocimiento de las sociedades del pasado. No obstante, el desarrollo de la Arqueología ha llevado en numerosos casos a una “ultraespecialización” de la investigación, haciendo que estudios como los paleoambientales se conviertan en un fin en sí mismos y se olviden las sociedades humanas que hay detrás. En este sentido, queremos apartarnos de la figura del arqueólogo paleoambiental aislado en su laboratorio, que no participe activamente en la construcción del registro arqueológico y que no intervenga en la interpretación histórica global del yacimiento. Insistimos en la idea de la integración de los datos paleoambientales dentro de un discurso arqueológico amplio, entendiendo que las sociedades son totalidades que no pueden parcelarse en diversos campos y que no pueden estudiarse aisladamente. Y es que esta tendencia ha conllevado que los estudios paleoambientales se alejen de su verdadero fin arqueológico: la reconstrucción de las sociedades históricas en el contexto natural en el que vivían.
De este modo, el objetivo de este nuevo monográfico de Revista Arkeogazte es actuar como canalizador de las relaciones entre Arqueología y ciencias paleoambientales. Es por ello necesario enfatizar el término paisaje, como concepto teórico que aborda las relaciones entre el medio ambiente y las sociedades humanas. El paisaje, entendido como un constructo social y cultural, es un marco de trabajo excepcional que permite trasladar el objeto de análisis desde el “yacimiento” en sentido clásico, hacia una concepción más amplia e inclusiva. Asimismo, el paisaje es una construcción en el tiempo, lo que permite a la Arqueología analizarlo en sentido diacrónico como un palimpsesto de antiguos paisajes culturales que se van superponiendo unos a otros.
Además, desde esta perspectiva el estudio de la relación entre el ser humano y el medio ambiente puede contribuir a crear conciencia sobre el paisaje como un elemento fundamental dentro de nuestro patrimonio natural y cultural, abordando problemáticas actuales desde una perspectiva arqueológica y antropológica. En este sentido, es necesario resaltar el impacto que ha tenido el ser humano sobre los paisajes naturales, lo que ha llevado a entender que poco o nada queda de lo puramente natural y que el paisaje que ha llegado hasta nosotros no es más que el resultado de esta relación. No podemos olvidar que el paisaje actual es un producto activo de la interacción de todas las piezas que lo componen y un elemento a proteger tanto por sus valores históricos como ambientales, para lo cual es necesario investigar y conocer su génesis y desarrollo. En los últimos años la valorización de estos espacios ha impulsado numerosos proyectos de salvaguarda de este tipo de patrimonio, un patrimonio definido por la UNESCO (Documento WHC-92/CONF.002/12) como “paisajes culturales”, “espacios creados, formados y preservados por los vínculos y las interacciones entre el ser humano y su entorno”.
Por todo ello, desde el Comité Editorial de Revista Arkeogazte, proponemos para este tercer número explorar la relación entre Arqueologíae y medio ambiente reconsiderando su finalidad, originariamente clara pero actualmente dispersa. Siguiendo a Tolkien, queremos contar “una historia de una ida y de una vuelta”, un viaje de los orígenes al futuro de las ciencias paleoambientales aplicadas a la Arqueología, en el que las sociedades del pasado vuelvan a ser el fin y el sujeto principal de estudio; volver al origen del viaje sin olvidar el camino ya recorrido. Buscamos estudios paleoambientales en los que se considere, por un lado, el análisis de las sociedades históricas y, por otro, se enfatice el medio ambiente y el paisaje actual como elementos fundamentales de su acervo cultural.
Por lo tanto, en la sección monográfica se publicarán, por una parte, artículos en los que una disciplina paleoambiental específica y la Arqueología se unan para analizar la relación entre sociedades humanas y medio ambiente en un contexto histórico concreto. Las aproximaciones multiproxy en las que se combine más de una técnica para la lectura integral de los paisajes también serán bienvenidas. El acento de los trabajos debe estar sobre la contribución de las ciencias paleoambientales a la reconstrucción de comportamientos humanos. En ningún caso serán aceptados estudios de caso que no incorporen esta perspectiva. Sin embargo, se valorarán positivamente los artículos que ilustren el desarrollo teórico con la presentación de casos aplicados.
Por otra parte, se publicarán trabajos tanto generales como de casos particulares que combinen el análisis de los patrimonios ambiental e histórico como valores activos para la conservación de los paisajes culturales contemporáneos. Buscamos, por lo tanto, estudios que planteen la salvaguarda y la puesta en valor de los paisajes históricos como parte de la identidad de las sociedades actuales.
Como viene siendo habitual, además del monográfico, Revista Arkeogazte incluirá las secciones Varia y Recensiones. En la primera tendrá cabida cualquier artículo sobre Arqueología, sin límites cronológicos, geográficos o temáticos. Tanto estos trabajos, como los que se publiquen en la sección monográfica serán corregidos mediante el sistema de pares ciegos. Además, para este tercer número el Consejo Editorial ha decidido proponer una serie de títulos para Recensiones. Cualquier autor podrá participar en esta sección atendiendo a las sugerencias.
El plazo para la entrega de originales finaliza el 30 de abril de 2013. Las normas de publicación pueden consultarse en nuestra página web (www.arkeogazte.org) y cualquier duda o sugerencia puede gestionarse a través de la dirección de correo electrónico arkeogazterevista@gmail.com.
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