Castroverde lucha por su torre bajomedieval (Lugo)

La fortaleza de Montecubeiro llegó a ser de tres propietarios


Hace ya tiempo que el Concello de Castroverde está intentando llegar al final de un largo periplo para adquirir la titularidad de la fortaleza situada en Montecubeiro y que correspondió a tres propietarios. Debido a la dejadez de los mismos y a que tampoco las distintas Administraciones tomaron medidas, este monumento de triste recuerdo para la historia no está como debiera.

De hecho, algunos vecinos de Montecubeiro se quejan de que no se tomaran a tiempo las medidas adecuadas que lograran evitar las hendiduras, los desprendimientos y que algunos aprovecharan esas circunstancias para sustraer parte de este valioso patrimonio. Hoy, a duras penas se conserva la torre bajomedieval, también dañada. Y son visibles una parte de las murallas y los muros interiores, un pozo y la hermosa zona de los castros poblado de frondosos castiñeiros y nogueiras.

La adquisición de la propiedad de la fortaleza, de la que destaca su torre, es un arduo trabajo que viene desenvolviendo el Concello desde hace varias legislaturas. De hecho, fruto de esas gestiones, ya el anterior gobierno de la Xunta realizó un estudio y había consignado una partida de 150.000 euros que de momento está retenida para cuando el Concello que ahora preside el socialista José María Arias se hiciera con la propiedad total.

De los tres socios originales, propietarios de la parcela donde se sitúa esta hermosa torre bajomedieval, al Concello sólo le resta adquirir lo que aproximadamente representaría un uno por ciento del total. Con la familia de los Vilela y De la Vega ya se llegó al acuerdo y no hace mucho se consiguió localizar a alguno de los nietos de la familia Ferreirós que faltaba. Se está a la espera.

Mantenimiento

Por otra parte, en tanto no finalicen los trámites y llegue la adquisición de la propiedad donde se sitúa la Torre de Montecubeiro, el Concello asume las labores de desbroce y limpieza de la maleza, dado que no eran pocos los visitantes que se acercaban hasta este hermoso y simbólico lugar y, en cambio, tenían difícil el acceso.

Por ello, estos mismos días los operarios del Concello fueron quienes procedieron a desbrozar la parcela que rodea a la torre; en breve se ocuparán también de su retirada. Al menos eso dicen desde el Concello, toda vez que en esta época están prohibidas las quemas al aire libre, según informó el alcalde en funciones de Castroverde, José Madarro Rico.