Urbanismo recuperará la torre albarrana de la Puerta de Sevilla en Córdoba

La restauración de la atalaya defensiva del siglo XIV durará alrededor de seis meses y se centrará en la limpieza de sillares y mampostería


La Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Córdoba ha adjudicado, a favor de la empresa Ejuca S.A., los trabajos de consolidación y rehabilitación del conjunto arquitectónico de la torre albarrana de la Puerta de Sevilla. Dicho proyecto, según informó la Gerencia de Urbanismo en un comunicado, ha sido valorado en 109.462 euros, tiene un plazo de ejecución de seis meses y ha sido elaborado por el Servicio de Proyectos de la Gerencia Municipal de Urbanismo.

El presidente de la Gerencia de Urbanismo, Andrés Ocaña, aseguró que el proyecto pretende contribuir a la recuperación de la memoria arquitectónica de la ciudad "actuando sobre edificaciones señeras y siguiendo con el trabajo de rehabilitación de las murallas de la ciudad de Córdoba".

Las torres albarranas son aquellas que están construidas fuera de un recinto fortificado, aunque unidas a él por algún sistema constructivo, que contribuyen a realizar labores defensivas de un punto determinado del sistema de protección de la ciudad, como una puerta.

En este caso, empezó a levantarse bajo el mandato del alcalde mayor Lope Gutiérrez, en 1369, y se terminó en 1385, información corroborada documentalmente y por las investigaciones realizadas en la edificación por una empresa especializada.

El conjunto está formado por la torre de planta cuadrangular, construida con sillares de calcarenita; el pilar de acceso al conjunto desde el recinto amurallado, un sistema de arcos de herradura y una cubierta a base de mortero.

El teniente de alcalde de Urbanismo explicó que el proyecto pretende restaurar el complejo eliminando los agentes que han contribuido a su deterioro y borrar las huellas de las múltiples intervenciones que se han efectuado en la edificación a lo largo de la historia.

La torre albarrana de la Puerta de Sevilla ha sufrido varias actuaciones para paliar los efectos causados por sucesos de diversa índole que han contribuido a su deterioro. Según el proyecto, buena parte de los males del complejo fueron causados por el cauce del Arroyo del Moro, cuyo caudal atravesaba la zona con mucha fuerza.

Ocaña explicó que el proyecto de restauración, que abunda en el conocimiento del sistema de murallas de la ciudad, busca intervenir sobre la edificación lo menos posible y siempre con actuaciones que sean reversibles.

Así, se pretende mantener la fábrica original del conjunto siempre que no afecte a la estabilidad del mismo.

Las obras comprenden la limpieza de sillares y mampostería, así como su sustitución sólo en los casos en que sea totalmente necesario. Además, se impermeabilizará la cubierta para evitar la entrada de agua en el conjunto.