El horno meriní tendrá un edificio propio en el parque María Cristina de Algeciras (Cádiz)

El horno meriní se reubicará en un edificio propio que se instalará en la pista de patinaje existente en el parque María Cristina de Algeciras

El horno hallado en la calle Pérez Villalta, y datado en la época meriní, se reubicará en el parque María Cristina, concretamente en el espacio que hoy ocupa la pista de patinaje, y contará con un edificio propio.

Así lo manifestó ayer a este rotativo el concejal de Cultura del Ayuntamiento de Algeciras, Patricio González, quien señaló además que el expediente oportuno ya está culminado y a finales de la presente semana se entregará a Hermenegildo González para que lo deposite en la Diputación provincial y pueda de esta forma beneficiarse de la subvención europea que posibilita el programa Cultrurcad.

De esta forma se trastoca la primigenia idea de reubicar este horno junto al resto de los restos arqueológicos instalados en el parque María Cristina.

Cabe especular que las particulares características de esta pieza meriní hacen inviable que se mantenga en expuesto a la intemperie. Esta debe ser la razón que ha motivado a los técnicos de Cultura aconsejar a Patricio González el cambio de reubicación de esta pieza.

No sólo el horno meriní estará aislado del resto del conjunto arqueológico, sino que también contará con un edificio propio que le aislará de las inclemencias del tiempo.

Además, tampoco se descarta que este inmueble se convierta en una especie de museo en miniatura pues deberá contar con paneles explicativos alusivos a las funciones que tenía asignadas la pieza se exhibe.

El horno meriní fue hallado hace algo más de un año durante unas excavaciones realizadas en la calle Pérez Villalba, cerca del conjunto arqueológico de Blas Infante.

Poco después fue trasladado a una nave del polígono industrial Huerta de las Pilas, donde se ubica la empresa municipal de Limpieza. Desde entonces carece de los cuidados que necesita. Llegó a estar al descubierto, aunque tras una jornada lluviosa se optó por taparlo con un toldo.

La asociación de defensa del patrimonio La Trocha ha venido denunciando la situación desde hace meses. Su presidente, Manuel Correo, recordó ayer que se trata de un horno delicado. "Está cubierto de un yeso especial y hay que conservarlo a una temperatura y en unas condiciones de humedad especiales, en una especie de microclima", explicó.

Correro incidió también en que un componente de la asociación llegó a ofrecer al Ayuntamiento una nave en el Cortijo Real donde se podía guardar adecuadamente la pieza arqueológica. "Entendimos que allí estaría mejor que en el sitio donde lo tienen ahora, pero rechazaron nuestra proposición", dijo.