Una excavación saca a la luz en Jerez (Cádiz) los restos de unos vertederos y viviendas almohades
16/12/04 .- Diario de Jerez/Pilar Nieto
La excavación previa a una construcción junto a la calle de la Liebre saca a la luz los restos de unos vertederos y viviendas almohades
Las viviendas de 'Residencial siglo XII', situadas en las inmediaciones del palacio de Carrizosa y calle Liebre, hacen verdadero honor a su nombre, ya que bajo sus cimientos se encuentra una parte bastante representativa de la historia almohade de esta ciudad.
Como es preceptivo cada vez que se hace una intervención urbanística en el casco histórico, se han realizado una serie de excavaciones y estudios previos a la construcción, excavaciones que han corrido a cargo de la empresa gaditana Arqueogades dirigidas por el arqueólogo Ignacio Córdoba.
Los trabajos han durado aproximadamente cinco semanas, y han acabado hace unos veinte días. Según el arqueólogo, lo que se ha encontrado ha sido "una fase de ocupación almohade, correspondiente a finales del siglo XII y principios del XIII, con una zona de silos de almacenaje, basureros fundamentalmente".
Estos silos presentan distintas formas como pozos, en los que se encuentran todavía incluso los mechinales (huecos) para poder bajar. También los hay geminados (pareados) y acampanados, y se encuentran rellenos de cerámicas y restos óseos.
Ignacio Córdoba destaca especialmente el hecho de que "algunas de estas cerámicas son de muy buena calidad. Hay candiles, bacines (orinales), alcadaces (lebrillos), platos, de los que algunos conservan epígrafes y caracteres árabes o grandes jarros vidriados en verde y estampillados.
Al fondo del solar hay una zona que parece de viviendas, donde han aparecido unos muros de época almohade cruzados por otros de época cristiana. Según el arqueólogo, "debido a todas las reformas posteriores que se han realizado y el mal estado de conservación en el que se encuentran no se puede conocer la planta de esas viviendas, pero sí se sabe que esas construcciones tenían la función de hábitat y que han tenido varias fases posteriores".
Otra de aspectos que destaca es que "el firme natural de este asentamiento está muy en superficie, y por lo tanto los restos están muy arrasados".
Después de haber realizado la excavación, han tomado nota de todo, han dibujado la estructura del asentamiento y han sacado la planta, y aunque el hallazgo es de relativo interés, Ignacio Córdoba señala que "no tenemos conocimiento de la necesidad de una conservación mayor, así que la excavación ya se ha tapado una vez finalizados los correspondientes estudios".
Eso sí, con toda la cerámica encontrada se inicia ahora otra labor de recuperación y estudio. En este sentido el arqueólogo señala que "tenemos un año de tiempo antes de presentar la memoria, porque la cerámica es lo que más datos nos puede dar, y luego quedarán depositadas en el Museo Arqueológico de Jerez, que decidirá si tienen la suficiente entidad para ser expuestas o no".
En este sentido hay que recordar que el Museo Arqueológico Municipal cuenta con un acreditado equipo de restauración que, en anteriores ocasiones, ha recuperado piezas de cerámica o cristal totalmente fragmentadas hasta el punto de reconstruir totalmente la pieza completa tras un complejo trabajo que las deja incluso en condiciones de ser expuestas en cualquiera de las salas del museo.
Ignacio Córdoba tiene también palabras de reconocimiento para la promotora de Residencial Siglo XII, Atlanland "porque ha colaborado mucho con nosotros y ha actuado con muchísima corrección. Hay que tener en cuenta que en este tipo de cosas siempre hay muchísima presión para que se acabe pronto la excavación con el objeto de poder comenzar la construcción de los edificios, pero en este caso no ha sido así."
Las viviendas de 'Residencial siglo XII', situadas en las inmediaciones del palacio de Carrizosa y calle Liebre, hacen verdadero honor a su nombre, ya que bajo sus cimientos se encuentra una parte bastante representativa de la historia almohade de esta ciudad.
Como es preceptivo cada vez que se hace una intervención urbanística en el casco histórico, se han realizado una serie de excavaciones y estudios previos a la construcción, excavaciones que han corrido a cargo de la empresa gaditana Arqueogades dirigidas por el arqueólogo Ignacio Córdoba.
Los trabajos han durado aproximadamente cinco semanas, y han acabado hace unos veinte días. Según el arqueólogo, lo que se ha encontrado ha sido "una fase de ocupación almohade, correspondiente a finales del siglo XII y principios del XIII, con una zona de silos de almacenaje, basureros fundamentalmente".
Estos silos presentan distintas formas como pozos, en los que se encuentran todavía incluso los mechinales (huecos) para poder bajar. También los hay geminados (pareados) y acampanados, y se encuentran rellenos de cerámicas y restos óseos.
Ignacio Córdoba destaca especialmente el hecho de que "algunas de estas cerámicas son de muy buena calidad. Hay candiles, bacines (orinales), alcadaces (lebrillos), platos, de los que algunos conservan epígrafes y caracteres árabes o grandes jarros vidriados en verde y estampillados.
Al fondo del solar hay una zona que parece de viviendas, donde han aparecido unos muros de época almohade cruzados por otros de época cristiana. Según el arqueólogo, "debido a todas las reformas posteriores que se han realizado y el mal estado de conservación en el que se encuentran no se puede conocer la planta de esas viviendas, pero sí se sabe que esas construcciones tenían la función de hábitat y que han tenido varias fases posteriores".
Otra de aspectos que destaca es que "el firme natural de este asentamiento está muy en superficie, y por lo tanto los restos están muy arrasados".
Después de haber realizado la excavación, han tomado nota de todo, han dibujado la estructura del asentamiento y han sacado la planta, y aunque el hallazgo es de relativo interés, Ignacio Córdoba señala que "no tenemos conocimiento de la necesidad de una conservación mayor, así que la excavación ya se ha tapado una vez finalizados los correspondientes estudios".
Eso sí, con toda la cerámica encontrada se inicia ahora otra labor de recuperación y estudio. En este sentido el arqueólogo señala que "tenemos un año de tiempo antes de presentar la memoria, porque la cerámica es lo que más datos nos puede dar, y luego quedarán depositadas en el Museo Arqueológico de Jerez, que decidirá si tienen la suficiente entidad para ser expuestas o no".
En este sentido hay que recordar que el Museo Arqueológico Municipal cuenta con un acreditado equipo de restauración que, en anteriores ocasiones, ha recuperado piezas de cerámica o cristal totalmente fragmentadas hasta el punto de reconstruir totalmente la pieza completa tras un complejo trabajo que las deja incluso en condiciones de ser expuestas en cualquiera de las salas del museo.
Ignacio Córdoba tiene también palabras de reconocimiento para la promotora de Residencial Siglo XII, Atlanland "porque ha colaborado mucho con nosotros y ha actuado con muchísima corrección. Hay que tener en cuenta que en este tipo de cosas siempre hay muchísima presión para que se acabe pronto la excavación con el objeto de poder comenzar la construcción de los edificios, pero en este caso no ha sido así."
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