Obras sacan a la luz restos de la villa bizantina que fue arrasada en Ibiza
19/4/13 .- http://www.diariodeibiza.es
Las obras de instalación de una tubería de saneamiento en el lateral de la autovía del aeropuerto, frente al restaurante ses Campanes, han sacado al descubierto restos arqueológicos que, supuestamente, son parte de la estructura de la villa rural de los siglos VI y VII de la era cristiana (época bizantina) que fue destruida por las obras de ampliación de la carretera. Desde hace semanas, el vial lateral de la autovía está cerrado al tráfico. Solo se puede acceder a la gasolinera.
El Ayuntamiento de Sant Josep explicó ayer a este periódico que las obras están paralizadas porque se han hallado restos arqueológicos «similares a los que aparecieron en su día en la misma zona cuando se hizo la ampliación de la carretera». El exdirector insular de Patrimonio, Josep María López Garí, arqueólogo de profesión, confirmó tras comprobar las imágenes tomadas por este periódico que se trata de «una continuación de la villa» que se halló en 2006 durante las obras de la autovía. La Comisión de Patrimonio autorizó la destrucción del yacimiento después de que los arqueólogos informaran de que los restos, en conjunto, estaban «faltos de toda monumentalidad». El hallazgo consistía en una antigua mansión rural con un pozo de agua, dos tumbas, un horno y otras dependencias.
La consellera de Cultura, Pepa Costa, aseguró que no tenía conocimiento de que los restos pudieran ser parte de la antigua villa, sino que, al menos hasta ayer, le habían informado de que se trataba de «una zanja de cultivo» de época romana. «No tengo conocimiento de que haya habido algo más. A no ser que haya llegado un informe de última hora que no conozca», dijo.
Las estructuras que se pusieron al descubierto durante las obras de la autovía presentaban la base de sus muros en relativo buen estado y ocupaban una superficie aproximada de 300 metros cuadrados. En su día, el arqueólogo Ricard Marlasca señaló que «al menos diez metros» de la antigua villa habían sido cortados sin que se hubiera hecho «ningún tipo de seguimiento ni documentación», aunque los arqueólogos contratados por la constructora defendieron que se había delimitado «totalmente» el perímetro del yacimiento y que solo un muro de escasa longitud fue suprimido «manualmente» después de haber sido «documentado».
En todo caso, finalmente todo el conjunto fue destruido, en lugar de conservarse bajo tierra, el mismo final que tuvo otro hallado cerca del hipódromo. Tras el cambio de gobierno de 2007, el Consell optó por conservar (enterrar bajo las obras) parte de una necrópolis islámica y los restos de una villa de la misma época hallados más adelante, en dirección al aeropuerto.
El Ayuntamiento de Sant Josep explicó ayer a este periódico que las obras están paralizadas porque se han hallado restos arqueológicos «similares a los que aparecieron en su día en la misma zona cuando se hizo la ampliación de la carretera». El exdirector insular de Patrimonio, Josep María López Garí, arqueólogo de profesión, confirmó tras comprobar las imágenes tomadas por este periódico que se trata de «una continuación de la villa» que se halló en 2006 durante las obras de la autovía. La Comisión de Patrimonio autorizó la destrucción del yacimiento después de que los arqueólogos informaran de que los restos, en conjunto, estaban «faltos de toda monumentalidad». El hallazgo consistía en una antigua mansión rural con un pozo de agua, dos tumbas, un horno y otras dependencias.
La consellera de Cultura, Pepa Costa, aseguró que no tenía conocimiento de que los restos pudieran ser parte de la antigua villa, sino que, al menos hasta ayer, le habían informado de que se trataba de «una zanja de cultivo» de época romana. «No tengo conocimiento de que haya habido algo más. A no ser que haya llegado un informe de última hora que no conozca», dijo.
Las estructuras que se pusieron al descubierto durante las obras de la autovía presentaban la base de sus muros en relativo buen estado y ocupaban una superficie aproximada de 300 metros cuadrados. En su día, el arqueólogo Ricard Marlasca señaló que «al menos diez metros» de la antigua villa habían sido cortados sin que se hubiera hecho «ningún tipo de seguimiento ni documentación», aunque los arqueólogos contratados por la constructora defendieron que se había delimitado «totalmente» el perímetro del yacimiento y que solo un muro de escasa longitud fue suprimido «manualmente» después de haber sido «documentado».
En todo caso, finalmente todo el conjunto fue destruido, en lugar de conservarse bajo tierra, el mismo final que tuvo otro hallado cerca del hipódromo. Tras el cambio de gobierno de 2007, el Consell optó por conservar (enterrar bajo las obras) parte de una necrópolis islámica y los restos de una villa de la misma época hallados más adelante, en dirección al aeropuerto.
Noticias relacionadas
- Obras municipales sacan a la luz restos de la muralla de Gandia
- Obras del Castillo de Salobreña sacan a la luz restos de la época medieval
- Las obras ferroviarias de Medina del Campo sacan a la luz restos del medievo (Valladolid)
- Las obras sacan a la luz restos arqueológicos árabes del s. X en Talamanca del Jarama (Madrid)
- Unas obras sacan a la luz restos de una necrópolis medieval en Villafrechós (Valladolid)
Comenta la noticia desde Facebook
Comentarios
No hay comentarios.
Para escribir un comentario es necesario entrar (si ya es usuario registrado) o registrarse