Excavaciones de Parpalinas se centrarán en descubrir localizaciones de San Millán de la Cogolla en e
13/7/11 .- http://antiguaymedieval.blogspot.com
El Campo de Trabajo 'Recuperación y estudio del patrimonio arqueológico en el yacimiento de Parpalinas (Valle de Ocón)' indagará las huellas de San Millán de la Cogolla.
Dirigido por Urbano Espinosa, catedrático de Historia Antigua de la UR, cuenta con el apoyo de la Consejería de Presidencia del Gobierno de La Rioja, a través del Instituto Riojano de la Juventud, el Ayuntamiento de Ocón y la Universidad de La Rioja.
El Campo de Trabajo sobre 'Recuperación y estudio del patrimonio arqueológico en el yacimiento de Parpalinas' forma parte del programa de Cursos de Verano de la Universidad de La Rioja 2011, mediante la aportación de los medios técnicos para las tareas de laboratorio, clasificación, inventario y estudio de los restos arqueológicos.
En él participan unos quince universitarios, que se beneficiarán de una formación práctica, desarrollada en un entorno diferente al habitual de las aulas. El objetivo es que participen y conozcan las técnicas y los métodos de trabajo propios de una excavación arqueológica, a realizar en este caso en el yacimiento de Parpalinas, dentro del término de Pipaona de Ocón.
Por las mañanas se llevan a cabo las tareas de campo y las tardes se dedican a la realización de inventario y clasificación, así como al aprendizaje de cuestiones relacionadas con la gestión y difusión del patrimonio cultural.
PARPALINAS Y SAN MILLÁN DE LA COGOLLA
Las actividades arqueológicas del Campo de Trabajo tienen por objeto contrastar la veracidad histórica de la información aportada por la Vida de San Millán escrita por San Braulio, conocer en detalle el tiempo real en el que vivió el santo anacoreta y rescatar un patrimonio histórico que puede contribuir mediante su puesta en valor a la dinamización del medio rural.
El enclave de Parpalinas fue visitado hacia mediados del s. VI por San Millán de la Cogolla, tal como testimonia en el s. VII el obispo Braulio de Zaragoza al escribir la vida del santo eremita. Aquí, en Parpalinas, San Millán realizó un exorcismo en la casa del senador Honorio, quien desde ese momento se convirtió en un protector del cenobio emilianense.
La presente campaña se centrará en descubrir los restos de esa casa, dando continuidad al trabajo iniciado en años anteriores. Por eso, al sacar a la luz el escenario real donde se desenvolvió san Millán, puede decirse que los jóvenes participantes en el campo de verano estarán literalmente tras las huellas del santo.
Además del trabajo arqueológico, los universitarios también girarán visitas a diversos enclaves de interés histórico y patrimonial del entorno próximo, como una forma de ampliar su abanico formativo.
El campo de trabajo pretende vincular a los jóvenes a actividades relacionadas con la recuperación, estudio y divulgación del patrimonio.
Va dirigido de manera especial a aquellos universitarios de las ramas de Historia y Humanidades, al objeto de que, como futuros titulados superiores, se encuentren lo mejor preparados posible desde el punto de vista profesional y técnico para participar en proyectos de puesta en valor del patrimonio histórico y cultural.
El campo del Valle de Ocón cubre, al menos, un triple objetivo, en primer lugar, ofrecer a los jóvenes la oportunidad de adquirir una formación de tipo práctico en diversos aspectos relacionados con el estudio del patrimonio histórico, que les permita completar su perfil formativo reglado.
Se suma recuperar un importante legado patrimonial y, así, contribuir al desarrollo de las áreas rurales mediante la puesta en valor de ese patrimonio; y, por último, educar a los jóvenes en los valores del respeto hacia el propio patrimonio, así como en los de la cooperación y la solidaridad, a través de una convivencia organizada.
Hallan restos de la II Edad del Hierro bajo la iglesia de San Millán
El hallazgo demuestra que el yacimiento celtíbero sepulvedano, con centro en el cerro de Somosierra, es más amplio de lo que se creía.
Una excavación arqueológica llevada a cabo por la empresa 'Arex Servicios de Arqueología S.L.' ha permitido hallar diversos restos prehistóricos, de la II Edad del Hierro (siglos IV - I antes de Cristo), bajo la iglesia de San Millán, que se encuentra actualmente en estado de ruina.
Los trabajos arqueológicos, promovidos por la propiedad de la parcela, han consistido en la realización de tres sondeos, dos de ellos en el interior de la iglesia y uno en el exterior. En los dos primeros, bajo enterramientos medievales, los arqueólogos han descubierto diversos fragmentos cerámicos, realizados tanto a mano como a torno, característicos de la II Edad del Hierro. La arqueóloga Clara Martín ha confirmado a esta Redacción que "la secuencia de la ocupación pasa directamente de la Edad Media a la II Edad del Hierro, sin que haya ningún resto de ocupación romana". A juicio de Martín, este hallazgo demuestra que el yacimiento celtibérico de Sepúlveda, situado en el denominado 'cerro de Somosierra', "se extiende más de lo que inicialmente se pensaba, hasta San Millán".
Para el arqueólogo Santiago Martínez Caballero, conservador del Museo de Segovia, el cerro de Somosierra sería una ciudad fortificada celtíbera autónoma, de los arévacos, que dispondría de sus propios territorios, y desde la que sus ocupantes controlarían el alto valle del Duratón. Martínez Caballero defiende que las acciones militares del romano Tito Didio en el centro de la Meseta Norte desarrolladas entre los años 98 y 94 a. C. debieron conllevar la total anexión del valle del Duratón y, por tanto, la conquista de Sepúlveda.
Dirigido por Urbano Espinosa, catedrático de Historia Antigua de la UR, cuenta con el apoyo de la Consejería de Presidencia del Gobierno de La Rioja, a través del Instituto Riojano de la Juventud, el Ayuntamiento de Ocón y la Universidad de La Rioja.
El Campo de Trabajo sobre 'Recuperación y estudio del patrimonio arqueológico en el yacimiento de Parpalinas' forma parte del programa de Cursos de Verano de la Universidad de La Rioja 2011, mediante la aportación de los medios técnicos para las tareas de laboratorio, clasificación, inventario y estudio de los restos arqueológicos.
En él participan unos quince universitarios, que se beneficiarán de una formación práctica, desarrollada en un entorno diferente al habitual de las aulas. El objetivo es que participen y conozcan las técnicas y los métodos de trabajo propios de una excavación arqueológica, a realizar en este caso en el yacimiento de Parpalinas, dentro del término de Pipaona de Ocón.
Por las mañanas se llevan a cabo las tareas de campo y las tardes se dedican a la realización de inventario y clasificación, así como al aprendizaje de cuestiones relacionadas con la gestión y difusión del patrimonio cultural.
PARPALINAS Y SAN MILLÁN DE LA COGOLLA
Las actividades arqueológicas del Campo de Trabajo tienen por objeto contrastar la veracidad histórica de la información aportada por la Vida de San Millán escrita por San Braulio, conocer en detalle el tiempo real en el que vivió el santo anacoreta y rescatar un patrimonio histórico que puede contribuir mediante su puesta en valor a la dinamización del medio rural.
El enclave de Parpalinas fue visitado hacia mediados del s. VI por San Millán de la Cogolla, tal como testimonia en el s. VII el obispo Braulio de Zaragoza al escribir la vida del santo eremita. Aquí, en Parpalinas, San Millán realizó un exorcismo en la casa del senador Honorio, quien desde ese momento se convirtió en un protector del cenobio emilianense.
La presente campaña se centrará en descubrir los restos de esa casa, dando continuidad al trabajo iniciado en años anteriores. Por eso, al sacar a la luz el escenario real donde se desenvolvió san Millán, puede decirse que los jóvenes participantes en el campo de verano estarán literalmente tras las huellas del santo.
Además del trabajo arqueológico, los universitarios también girarán visitas a diversos enclaves de interés histórico y patrimonial del entorno próximo, como una forma de ampliar su abanico formativo.
El campo de trabajo pretende vincular a los jóvenes a actividades relacionadas con la recuperación, estudio y divulgación del patrimonio.
Va dirigido de manera especial a aquellos universitarios de las ramas de Historia y Humanidades, al objeto de que, como futuros titulados superiores, se encuentren lo mejor preparados posible desde el punto de vista profesional y técnico para participar en proyectos de puesta en valor del patrimonio histórico y cultural.
El campo del Valle de Ocón cubre, al menos, un triple objetivo, en primer lugar, ofrecer a los jóvenes la oportunidad de adquirir una formación de tipo práctico en diversos aspectos relacionados con el estudio del patrimonio histórico, que les permita completar su perfil formativo reglado.
Se suma recuperar un importante legado patrimonial y, así, contribuir al desarrollo de las áreas rurales mediante la puesta en valor de ese patrimonio; y, por último, educar a los jóvenes en los valores del respeto hacia el propio patrimonio, así como en los de la cooperación y la solidaridad, a través de una convivencia organizada.
Hallan restos de la II Edad del Hierro bajo la iglesia de San Millán
El hallazgo demuestra que el yacimiento celtíbero sepulvedano, con centro en el cerro de Somosierra, es más amplio de lo que se creía.
Una excavación arqueológica llevada a cabo por la empresa 'Arex Servicios de Arqueología S.L.' ha permitido hallar diversos restos prehistóricos, de la II Edad del Hierro (siglos IV - I antes de Cristo), bajo la iglesia de San Millán, que se encuentra actualmente en estado de ruina.
Los trabajos arqueológicos, promovidos por la propiedad de la parcela, han consistido en la realización de tres sondeos, dos de ellos en el interior de la iglesia y uno en el exterior. En los dos primeros, bajo enterramientos medievales, los arqueólogos han descubierto diversos fragmentos cerámicos, realizados tanto a mano como a torno, característicos de la II Edad del Hierro. La arqueóloga Clara Martín ha confirmado a esta Redacción que "la secuencia de la ocupación pasa directamente de la Edad Media a la II Edad del Hierro, sin que haya ningún resto de ocupación romana". A juicio de Martín, este hallazgo demuestra que el yacimiento celtibérico de Sepúlveda, situado en el denominado 'cerro de Somosierra', "se extiende más de lo que inicialmente se pensaba, hasta San Millán".
Para el arqueólogo Santiago Martínez Caballero, conservador del Museo de Segovia, el cerro de Somosierra sería una ciudad fortificada celtíbera autónoma, de los arévacos, que dispondría de sus propios territorios, y desde la que sus ocupantes controlarían el alto valle del Duratón. Martínez Caballero defiende que las acciones militares del romano Tito Didio en el centro de la Meseta Norte desarrolladas entre los años 98 y 94 a. C. debieron conllevar la total anexión del valle del Duratón y, por tanto, la conquista de Sepúlveda.
Noticias relacionadas
- Buscan las huellas de San Millán de la Cogolla en la zona de Parpalinas
- Campo de trabajo de Ocón prueban la visita de San Millán de la Cogolla en el s. VI
- Medina Azahara: un siglo de excavaciones y el 90% aún por descubrir
- Los arqueólogos centrarán su tarea en la restauración del castillo de Gauzón
- Un Reino por descubrir a través de sus batallas (Jaén)
Comenta la noticia desde Facebook
Comentarios
No hay comentarios.
Para escribir un comentario es necesario entrar (si ya es usuario registrado) o registrarse