El arreglo del barrio judío de Valls descubre nuevos restos medievales (Tarragona)

El arreglo del barrio judío de Valls descubre nuevos restos medievales (Tarragona)

El arreglo del barrio judío de Valls ha sacado a la luz nuevos restos medievales, como catorce silos y estructuras de muro, informa la comisión de patrimonio municipal.

Los arqueólogos creen que los restos hallados cerca de la muralla de San Antonio pueden ser los fundamentos del antiguo portal medieval de finales del siglo XIV.

Esta cimentación de mampostería posteriormente habría sido reutilizada como parte de una vivienda, como ponen de manifiesto un depósito y un lagar que se han encontrado en el mismo ámbito.

En la calle de Artús, se han localizado catorce silos y dos estructuras de muro que también serían de época medieval, aunque no se han podido datar con precisión.

Los arqueólogos han avanzado que el seguimiento efectuado en las obras en la calle Costa de l'Església han sacado a la luz una escalinata que salvaba la pendiente de la calle, que podría datar de finales del siglo XVI.

En la misma calle, también se hallaron restos óseos humanos y han determinado que se trata de un enterramiento anterior al siglo XVI que estaría relacionado con un antiguo cementerio de la zona, si bien en los próximos días se practicará un estudio de los restos.

Por otra parte, la construcción del Museo Casteller ha permitido descubrir arcos medievales de entre los siglos XIII y XIV y otras estructuras más modernas, como lagares de los siglos XVII o XVIII.

El Ayuntamiento proyecta conservar algunas de estas estructuras, integrarlas en el entorno urbanístico y que sean visibles.

La Comisión también abordó la reanudación de los trabajos de excavaciones y prospecciones arqueológicas que están realizando la Universidad de Barcelona y el Instituto Catalán de Arqueología Clásica en el asentamiento ibérico del Vilar.

Los últimos trabajos pusieron al descubierto restos de un foso defensivo de cinco metros de profundidad y catorce metros de ancho de 2.200 años de antigüedad.

La próxima semana se retomarán los trabajos y las prospecciones geofísicas para intentar delimitar la muralla y el ámbito de la antigua ciudad, que se cree que podría tener una superficie de entre 6 y 8 hectáreas. EFE