La UNED desarrolla método para conocer si restos arqueológicos se han desplazado por el agua o el vi

La UNED desarrolla un método para conocer si los restos arqueológicos han sido desplazados por el agua o el viento. Un equipo de investigadores de la Universidad Nacional de Educación a Distancia ha desarrollado un método de investigación estadística para averiguar si los restos óseos hallados en un yacimiento arqueológico se encuentran en su posición original, o bien han sido desplazados por el cauce de un río o por fuertes rachas de viento.

Para ello, los científicos han llevado a cabo una investigación estadística para la que se han sumergido un total de 82 huesos de ciervo y cerdo en el río Guadarrama de Madrid, a una profundidad de 25 centímetros y a lo largo de cuatro metros del cauce, en un punto entre las localidades madrileñas de Boadilla del Monte y Brunete.

Como los investigadores conocían cuál era la dirección del río, obteniendo la media de los tres ejes de los restos óseos pudieron comprobar cuál era la más cercana a la dirección verdadera.

Los resultados del experimento, muestran que, para conocer si los restos han sido desplazados a lo largo de un cauce fluvial, "lo más adecuado es analizar los ejes mayores de los huesos largos, es decir, los que recorren la mitad del hueso", según ha indicado investigador del departamento de Estadística, Investigación Operativa y Cálculo Numérico de la UNED, Alfonso García-Pérez.

"Si todos los huesos largos están en la misma dirección significaría que se han desplazado por el agua o por el aire", ha concluido.