Un plan director para restaurar las murallas (Granada)

La asociación para la difusión y protección del patrimonio Oppidum Eléberis se ha dirigido a la Delegación Territorial de la Consejería de Cultura (Junta de Andalucía) y al Ayuntamiento de Granada para denunciar el “abandono y degradación” de las murallas del Albaicín y Sacromonte, y proponer un plan director de los recintos amurallados de Granada.

Los vestigios más antiguos que aún subsisten de la capital, según recuerda dicho colectivo, datan del siglo XI, pertenecientes al Reino o Taifa de Zawi Be Zirí. Se trata de las murallas y puertas de la antigua Alcazaba Qadima y la Madinat Garnata que hoy, junto con las distintas cercas que fueron cerrando los nuevos arrabales de la ciudad musulmana, con las dinastías almorávides, almohades y nazaríes, se debaten entre el “olvido y la degradación”.

En este sentido, el coordinador de Oppidum Eléberis, Narciso Crespo, considera que la conmemoración del Milenio del Reino de Granada 1013-2013 “será un fiasco, al menos en Granada, si no sirve para poner las bases que permitan la restauración y difusión de este importante legado histórico”. Recuerda que la Junta de Andalucía, como administración competente en territorio andaluz, y el Ministerio de Cultura, como titular propietario, tienen la obligación de proteger y conservar las Murallas de Granada.

En sendos escritos presentados ante la Delegación de Cultura de la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Granada se hace constar también “la utilización de su entorno protegido como aparcamiento de vehículos, la disparidad de criterios a la hora de intervenir en su restauración, la ubicación de murallas y torreones en el interior de cármenes privados sin acceso público y la ausencia de paneles informativos” que, según Crespo, contraviene la Ley del Patrimonio Histórico español y andaluz.

En dichos documentos, Oppidum Eléberis ha solicitado la redacción y ejecución del plan director de las murallas de Granada con un programa plurianual de actuaciones que cuente con financiación de la Junta de Andalucía y el Ministerio de Cultura, similar al de ciudades como Toledo o Zamora.

También propone acercar y dar a conocer estos vestigios a la ciudadanía con la creación de un centro de interpretación de las murallas y el diseño de rutas urbanas peatonales, así como el derecho legal de visita pública y gratuita, al menos cuatro días al mes, de los recintos amurallados que permanecen cercados o aislados en el interior de los cármenes. Sobre esto último, la asociación cultural propone que se estudie la situación jurídica sobre la propiedad de los distintos torreones que permanecen en el interior o integrados en los distintos cármenes y conventos con la idea de que se restituyan al Patrimonio Nacional y Andaluz.

En su escrito al Ayuntamiento Granada le solicita que lidere esta iniciativa con la presentación y aprobación en pleno de una moción dirigida a la Junta de Andalucía, solicitando la redacción del plan director de las murallas de Granada conjuntamente con el Ministerio de Cultura y la supresión de la revisión del Pepri, Albaicín y Sacromonte de 2008 de los aparcamientos previstos en los entornos protegidos de los paños de la muralla nazarí, en la curva del Tambor, San Antonio y la Alberzana. En sus escritos se recuerda que todo el recinto amurallado de la Granada histórica existente y su entorno, así como los paños que se puedan excavar, están protegidos como Bien de Interés Cultural y forman parte del Patrimonio Histórico Nacional y Andaluz.

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