La segunda fase de la obra del castillo comienza con un año de retraso (Baena, Córdoba)

Las actuaciones, que cuentan con un periodo de ejecución previsto de diez meses y un coste superior a los 1,8 millones de euros, se iniciarán a lo largo de esta semana

Las obras de la segunda fase de la restauración y rehabilitación del castillo de la Almedina de la localidad de Baena se iniciarán a lo largo de esta semana tras sufrir un retraso de un año al hacerse un modificado en la obra. Así al menos lo aseguró ayer a El Día el concejal de Urbanismo, José Andrés García Malagón, al tiempo que indicó que "en estos momentos se están llevando a cabo las entrevistas de trabajo por parte de las empresas adjudicatarias, que no han sido pocas".

De cumplirse los plazos previstos, las actuaciones en el castillo medieval de la Almedina podrán estar finalizadas el próximo verano, permitiendo así abrir sus puertas para las visitas al público. El periodo de ejecución de las obras es de 10 meses y la adjudicación de las misma ha sido para la Unión Temporal de Empresas (UTE) Azuche 88, y Fajosa que presentó una oferta superior a los 1,8 millones de euros.

Los trabajos de esta segunda fase consisten en la recuperación de la Torre de los Cascabeles y la de las Arqueras. Ambas estaban totalmente arrasadas, pero se tiene constancia de su existencia por diferentes documentos históricos. Con la recuperación de estas torres se generarán nuevos espacios. Así, la Torre de los Cascabeles albergará un mirador a escala urbana, desde el que se podrá contemplar el interior del castillo y el municipio de Baena. Por su parte, en la Torre de las Arqueras, la mayor de la fortaleza, se ubicará el centro de recepción de visitantes. Este espacio tendrá una superficie útil de 350 metros cuadrados. Además, en su terraza se creará un mirador a escala territorial.

Junto a la reconstrucción de volúmenes se llevarán a cabo intervenciones sobre los nuevos volúmenes recuperados en la primera fase, con el objetivo de texturizar los mismos de modo que se asemejen más al original, siempre salvaguardando la diferenciación entre lo original y lo reconstruido.

Las intervenciones llevadas a cabo en el castillo de Baena, pretenden no sólo recuperar el patrimonio que representa este inmueble, sino además, ponerlo al servicio de la industria turística de la localidad, dentro del proyecto BaenaCultura, así como revitalizar el casco antiguo gracias a gozar de una importante infraestructura como es esta. Ya se está redactando el proyecto para la tercera fase que pretende adaptar el castillo tanto para usos culturales como turísticos, a pesar de que la propia visita al inmueble, una vez que estén finalizados los trabajos de la segunda fase, será un atractivo de especial interés para la ciudad.

La restauración del castillo se financia con el 1% cultural aportado por el Ministerio de Fomento, estando el 30% del coste a cargo del Ayuntamiento. Al mismo tiempo, la oferta realizada en materia de contratación -lo cual conformaba otro de los aspectos a tener en cuenta dentro de la oferta- es de 10.200 jornales de personal que esté inscrito en las oficinas del Servicio Andaluz de Empleo de Baena como demandantes de empleo. La empresa adjudicataria de las actuaciones está seleccionando a los trabajadores que se encargarán de las obras.