La UNESCO critica la restauración de la Muralla de la Hoya de Almería

El centro UNESCO de Andalucía ha emitido un informe en el que califica de "desafortunada" e "injustificada" la restauración de la Muralla del Barranco de la Hoya, en el entorno de la Alcazaba de Almería, mediante la utilización de planchas de acero corten.

El informe, fechado el 10 de marzo y al que ha tenido acceso Efe, considera que esta restauración, promovida por la Consejería de Cultura con la cofinanciación del Estado, constituye "una desafortunada actuación que permite la experimentación injustificada" en un monumento de gran relevancia histórica.
Esta restauración con añadidos de acero, que ha generado polémica en la sociedad almeriense, refleja para la UNESCO "la voluntad de creatividad artística contemporánea frente a la poética del lugar, los valores de las técnicas constructivas tradicionales y la imagen consolidada del monumento".
"Esta intervención es aún más grave cuando se hace sobre un BIC (Bien de Interés Cultural) de propiedad pública, con promoción y financiación también públicas, por lo que podría ser interpretada como un ejemplo a seguir en futuras intervenciones", advierte el organismo.
Por ello, aboga por aplicar el "criterio de reversibilidad" y "recuperar los valores estéticos y patrimoniales que tenía la muralla del Barranco de la Hoya antes de la reintegración de volúmenes realizada con acero corten".
El proyecto de restauración, llevado a cabo por el arquitecto Jesús Basterra con la aprobación de la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico, tenía el objetivo de consolidar la estructura y solucionar los problemas de humedades y filtraciones, para lo que se han instalado placas de acero corten en algunas torres.
Para la UNESCO, este material presenta una "textura lisa y un color marrón oscuro que supone un tremendo contraste con el resto de la muralla, tanto en la visión frontal de las torres como en la vista de sus terrazas superiores desde el cerro de San Cristóbal y la Alcazaba".
El organismo de las Naciones Unidas recuerda que la muralla, que fue construida con la técnica de tapial, la más utilizada en las fortificaciones urbanas andalusíes a partir del siglo XI, presenta una coloración ocre claro producida por la mezcla de sus componentes (piedras, grava, arena, tierra arcillosa y cal, mezclados con agua) y por la pátina que el tiempo ha producido en su superficie externa.
El acero corten, un material "novedoso y discordante", también tiene la "desventaja de que producirá manchas de oxidación" en la muralla por encontrarse en un ambiente próximo al mar y a la intemperie, subraya el informe.