La obra de la capilla de Mosteiro descubre restos de policromía y marcas medievales (Vigo)

La obra de la capilla de Mosteiro descubre restos de policromía y marcas medievales (Vigo)

Construcciones Abal concluye los trabajos, que suponen la recuperación funcional y turística de la ermita -También catalogan fragmentos de columnas y de un empedrado

Las obras de restauración de la capilla de Mosteiro, en Meis, han propiciado el hallazgo de breitling replica elementos artísticos y constructivos que ayudarán a conocer mejor el templo. Así, por ejemplo, durante los trabajos de limpieza del ábside, los operarios localizaron restos de policromía en una de las columnas, lo que hace suponer que todo el ábside estuvo pintado en el pasado. El saneamiento de la piedra también ha permitido localizar o resaltar marcas medievales, como las realizadas por los canteros en los sillares situados tras el altar mayor o la vara de medir que se puede encontrar en una de las paredes. Se trata de una línea prácticamente imperceptible, pero que puede ser de gran interés para los expertos, dado que se trata supuestamente de la marca a partir de la cual se definieron las dimensiones de toda la capilla, pues en aquel entonces no existían instrumentos de medición como los metros.

La empresa Construcciones Abal ya ha finalizado los trabajos de restauración del templo, que estaba en muy mal estado debido a las filtraciones de agua que entraban por el tejado y las consecuentes humedades. En el transcurso de las obras también se encontraron restos arqueológicos, que han sido catalogados y depositados en el Museo de Pontevedra.

En concreto, una parte de la actuación incluía un drenaje en el perímetro exterior de la capilla, y la creación de una zanja cubierta con piedra suelta, para evitar que la humedad del suelo entrase por capilaridad en la capilla y dañase la nueva tarima de madera de castaño. Y fue durante ese drenaje cuando se encontraron restos de fustes y basas de columnas, que evidenciarían, en opinión de los arqueólogos, que la capilla sufrió una reconstrucción profunda a mediados del siglo XII, unos 200 años después de su construcción. Asimismo, al abrir la zanja han aparecido restos de un empedrado exterior.

Lo que no se ha encontrado finalmente es la tercera lápida que se sospecha que existe por fuentes bibliográficas. Se hicieron varias catas dentro en el interior de la capilla, pero no se encontró rastro de la lauda. Por ello, en Construcciones Abal plantean que si en efecto existe, como sostiene el historiador Hipólito de Saa Bravo, podría estar bajo el altar.

La restauración pone en valor una de las construcciones románicas más valiosas y antiguas de la comarca. Una obra que, por extensión, beneficia al conjunto de O Salnés y que podría valer como punto de partida para una futura ruta por el románico arousano. Desde el punto de vista religioso, permitirá a los feligreses disfrutar del templo en unas mejores condiciones.

La obra ha sido integral. Así, se cambió el tejado, se habilitó una nueva armazón interior con cerchas y tablas de una madera tropical que aguanta bien la humedad, se colocó una tarima de castaño, se limpió la piedra y se llevó a cabo el drenaje en el perímetro exterior del templo. La remodelación también es visible en el exterior, puesto que se ha empedrado el atrio, que antes era terreño, se han cambiado tanto la cancilla de entrada al recinto como la verja de cierre, y se ha plantado césped.

En cuanto a las dos laudas y el escudo situados al pie del altar, han quedado protegidos por un grueso cristal antideslizante. Está previsto que en los próximos días la presidenta de la Diputación, Carmela Silva, acuda a Mosteiro para ver en persona el resultado de los trabajos, en los que el ente provincial invirtió cerca de 190.000 euros.

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